¿Cómo ser una consumidora consciente?
Este es quizás uno de los grandes interrogantes que me hacía cuando quería cambiar mis hábitos de consumo, cómo poder realmente ser una consumidora más consciente y no fallar en el intento.
Primero debía quitarme uno de los grandes mitos sobre consumir más consciente y es que no esto no implica NO comprar nada nunca más; seamos realistas en este mundo capitalista sería ingenuo pensar en que nunca vas a volver a comprar nada más. Sin embargo, la clave está en la cantidad y recurrencia de aquellas compras.
Les confieso que hasta ahora estoy iniciando en este mundo del consumo consciente, si algo yo estaba en el otro extremo de las compras compulsivas y en cantidades desenfrenadas. Pero desde que empecé a formarme como asesora de imagen y aprender sobre la moda sostenible he cambiado mi percepción sobre la ropa y esa «necesidad» falsa que tenía en mi mente de tener que comprar más y más cada vez.
Aunque sigo comprando prendas lo hago de una forma diferente y he establecido 5 criterios principales (en orden de importancia) antes de comprar algo:
- ¿Realmente necesito esa prenda? ¿Tengo algo semejante en mi closet?
- ¿Es una marca local? o si es internacional acaso es fast fashion?
- Tipo de material: ¿acaso fue hecho a partir de materiales reciclados, siguiendo prácticas ambientales sostenibles o bajo una producción sostenible?
- ¿Podría encontrar esta prenda en una tienda second handed? o si es usada su estado es lo suficientemente bueno?
- Armo mentalmente al menos 5 outfits con esa prenda y las que ya tengo en mi armario
Si la compra pasa los 5 criterios anteriores es un SÍ y decido comprarla. Puede que a veces solo cumpla algunos pero aquí lo importante es que recapacitemos antes de comprar por comprar. De analizar un poco y poder tomar una decisión mucho más consciente.
Recuerda que al darle prioridad a prendas básicas, de marcas locales y que hayan sido producidas a partir de textiles reciclados también ayudas a que las grandes marcas de fast fashion no sigan ganando clientes y algún día seamos más los que compremos de forma consciente.
¿Qué dices, te sumas a esa iniciativa?